Historia de los gatos Ragdolls


El Ragdoll es una raza de gatos que tiene una historia interesante y algo misteriosa. Su origen se remonta a la década de 1960 en California, Estados Unidos, donde una mujer llamada Ann Baker comenzó a criar gatos con características únicas. La historia de cómo surgió esta raza tiene un toque de leyenda, ya que Ann afirmaba que sus gatos tenían habilidades extraordinarias y que eran descendientes de gatos "alienígenas".

Ann Baker tenía una gata blanca de pelo largo llamada Josephine, que supuestamente fue atropellada por un automóvil. Después del accidente, Josephine desarrolló una personalidad dócil y su pelaje se volvió más suave. Ann comenzó a criar gatitos a partir de Josephine y otros gatos de la zona, seleccionando aquellos con las características que buscaba: un pelaje largo y suave, ojos azules intensos y un temperamento tranquilo y cariñoso.

El nombre "Ragdoll", que en español significa "muñeca de trapo", se atribuye a la tendencia de estos gatos a relajarse completamente cuando se los levanta, como si fueran muñecas de trapo. Son conocidos por su tamaño grande y suave, así como por su naturaleza tranquila y afectuosa.

A pesar de las afirmaciones extravagantes de Ann Baker sobre el origen de la raza, la genética sugiere que los Ragdolls son el resultado de cruces selectivos entre varias razas de gatos, incluidos el Persa, el Birmano y el Sagrado de Birmania. Sin embargo, el misterio que rodea a los Ragdolls ha contribuido a su popularidad, y hoy en día son una de las razas de gatos más queridas y reconocidas en todo el mundo.

Los gatos Ragdolls también han ganado popularidad en Colombia en los últimos años. A medida que la gente en Colombia se ha interesado más por las razas de gatos exóticos y de pura raza, los Ragdolls han encontrado su lugar en el corazón de muchos amantes de los gatos en el país.

En Colombia, es posible encontrar criadores especializados en la cría y crianza de gatos Ragdolls. Estos criadores suelen ser cuidadosos en la selección de sus gatos reproductores para preservar las características deseables de la raza, como su temperamento amigable y tranquilo, así como su distintivo pelaje largo y suave.

En resumen, los Ragdolls han encontrado su lugar en Colombia, donde son apreciados por su personalidad cariñosa y su aspecto distintivo.